miércoles, 13 de julio de 2011

¿QUE SIGNIFICA SER LESBIANA?

Las lesbianas son mujeres que aman a otras mujeres. Somos mujeres que se sienten atraídas sexualmente por otras mujeres.
Somos mujeres que podemos sentirnos vinculadas más estrechamente a las mujeres emocional y espiritualmente. Somos mujeres que preferimos a otras mujeres como pareja. Como lesbianas, no estamos solas. Uno de cada diez adolescentes es lesbiana o gay. Muchas mujeres famosas de la historia eran lesbianas. Las lesbianas son docentes, médicas, abogadas, obreras de fábrica, agentes de policía, políticas, pastoras, estrellas de cine, artistas, madres, monjas, camioneras, modelos, novelistas. Hacen de todo lo habido y por haber.
Las lesbianas son blancas, negras, asiáticas, hispanas, indias americanas, judías, católicas, protestantes, budistas. Las lesbianas son ricas, pobres, de clase trabajadora y de clase media. Algunas lesbianas forman parte de matrimonios heterosexuales. Algunas lesbianas son discapacitadas. Las lesbianas son mujeres jóvenes y de edad avanzada. Las lesbianas viven en las ciudades y en el campo.

INFIDELIDAD LESBICA

Lesbianas Infieles
Existen estigmas y mitos alrededor de los homosexuales y las lesbianas, uno de ellos es el relacionado con la infidelidad, porque dicen que somos más infieles que los heterosexuales.
La realidad es que la infidelidad existe en hombres y mujeres de todas las edades, de cualquier orientación sexual, en todas las culturas, religiones y niveles sociales.

De acuerdo con los psicólogos Strean, Masters y Jonson, el hecho de involucrarse en una infidelidad indica la inmadurez e incapacidad emocional de la persona de entregarse emocional y sexualmente a su pareja.

En una relación lésbica, la infidelidad puede surgir cuando una de ellas se enamora de otra o tiene una aventura con otra mujer; y va desde un beso y un faje ocasional, hasta una relación sexual.

Para muchas lesbianas la infidelidad es traición al amor y a lo construido; sin embargo, para la infiel representa una salida de una relación agobiante o falta afecto.

De acuerdo con el libro Homosexualities, de Bell y Weinberg, las mujeres lesbianas valoran menos que los hombres gay la promiscuidad sexual y la variedad de parejas sexuales, además de que toleran menos la no exclusividad sexual.

Cuado se produce la infidelidad en una pareja lésbica surge la decepción y la autoestima se ve afectada (¿es ella más que yo?). El sentido de pertenencia y exclusividad que creían tener ocasiona celos, violencia, depresión.

Es inevitable conocer a mujeres que nos gusten estando con alguien más, pero depende de cada quien propiciar un encuentro o que se quede en la simple atracción.

Quienes inician una aventura encuentran emocionante el sentirse deseadas y esto viene a refrescar la monotonía o el encanto que falta con la pareja. Esta es una salida fácil, lo importante es hablar de cómo se siente cada quien en la relación.

En una pareja lésbica se debe mantener la comunicación. Aunque el amor esté presente, la sexualidad y los detalles son aspectos importantes. Debido a los pocos espacios que hay para mujeres lesbianas, es común que la infidelidad se dé generalmente con alguien cercano, alguna amiga, alguna conocida, una ex.

A veces es más fácil descubrir o ser cómplices de una infidelidad de alguien que conocemos, porque los espacios son pocos y siempre hay alguien que conoce a una de ellas.

Ahora, las lesbianas tenemos más libertad sexual, somos más independientes y no existe el riesgo de quedar embarazada, ni el tener que estar en una relación por los hijos o por un contrato matrimonial, a menos que se lleve una doble vida.

Para las lesbianas no es muy común que se dé la pareja abierta, la sexualidad entre amigas o encuentros sexuales ocasionales. Algunas lesbianas se sienten tan afectadas por la infidelidad de la pareja que piensan enseguida en romper la relación, por la perdida de confianza.

A nadie se le obliga a que viva en pareja o que establezca una relación de dos, pero quien esté dispuesta a estar en pareja tiene que respetar el compromiso que se establece en una relación y debe tener claro qué quiere cada quien. Nuestra vida social actual ofrece más posibilidades de comunicación, de conocer a alguien que nos guste.

Lo cierto es que todas tenemos poder de elección y de decisión, no hacemos algo que no queremos hacer. Si somos infieles es porque queremos serlo. A pesar de ello, es erróneo considerar que todos los colectivos de trabajo, los bares, las reuniones, el ambiente y las amistades son peligros para la relación. Es la persona quien decide su estilo de vida, no el ambiente.

Algunas parejas acuden a terapia para poder hablar de sus angustias cuando descubren una infidelidad. Algunas logran salvar la relación y otras se dan cuenta que es la consecuencia para dar por terminada la relación. Existen organizaciones de apoyo a la diversidad sexual en donde hay psicolog@s que pueden darte orientación y terapia individual y de pareja, consúltalos.


A las lesbianas no les gusta el sexo

Como lesbiana, la pregunta que más me exaspera es quizá la más estereotipada: ¿qué hacen las lesbianas en la cama? No sólo muestra quien la hace - sea hombre o mujer- carece de imaginación...
lesbiana con arnes
Sino también que desconoce la anatomía de la mujer y su reacción al estímulo sexual. Como nadie en esa cama tiene pene, se supone que la actividad sexual es imposible. Siempre hay alguien que piensa que lo único que hacen es abrazarse y se que son frígidas.

Pues no. Las lesbianas gozan de un sexo apasionado, excitante y muy satisfactorio de muchas formas distintas, que en otros artículos analizaremos con detalle.

Ser lesbiana no significa que te gusten todas las mujeres

Todas hemos vivido la incomodidad que provocamos a veces en las mujeres heterosexuales; ese cambio repentino de actitud cuando se percatan de que somos lesbianas.
Kama Sutra Lesbiano
Muchos heterosexuales parecen creer que los homosexuales somos sexualmente insaciables y que ansíamos llevarlos a la cama. También nos deben de creer muy desesperados, ya que hasta los menos atractivos pueden imaginar que ardemos en deseos de estar con ellos.

Sí, hay mujeres heterosexuales a las que deseamos, pero no por ello vamos ha hacer nada, del mismo modo que las mujeres heterosexuales no se insinúan a todos los hombres que conoces.

Las mujeres difieren mucho de los gays en sus actitudes sexuales. Mientras que algunos gays tienen relaciones sexuales con hombres heterosexuales (algunos lo buscan de modo activo), en general las lesbianas suelen buscar mujeres que están interesadas en otras mujeres. Es menos complicado y más excitante

¿Las lesbianas quieren ser hombres?

Que queramos acostarnos con otras mujeres no significa que queramos ser hombres.
Es una creencia muy antigua sobre las lesbianas que se repite una y otra vez: los medios de comunicación muestran mujeres agresivas, con la cabeza rapada y muy masculinas: la imagen opuesta a los gays.

Si se nos muestra de este modo, somos mas fáciles de descartar, ya que no somos verdaderas mujeres.

Pero nos costaría encontrar lesbianas que quieran ser hombres. Como antes, esta teoría surge de la inseguridad masculina ante las lesbianas y de la incomprensión total de que una mujer quiera acostarse con otra mujer en lugar de desear hacerlo con un hombre.

¿Tiene que habernos pasado algo para que seamos así?

Hoy quien dice que las mujeres recurren a otras mujeres porque les pasó algo.
Algo que puso a prueba su confianza en los hombres y por eso se sienten ahora más saguras con una mujer. Otros afirman que ello obedece a que los hombres las han defraudado.

También existe el argumento sobre si se nace homosexual o es por decisión propia.

Aunque a algunas mujeres les preocupa saber qué determina la orientación sexual, ése no es mi caso; soy lesbiana y punto.

A mi entender, el factor más importante es la felicidad: si estar con otra mujer y hacer el amor con ella te hace feliz, adelante. La vida es corta. Sólo se vive una vez y, sea cual sea el momento en que decidas que eso es lo que quieres, hazlo

Conocer a otras mujeres lesbianas

 
Una vez te declaras lesbiana, es probable que quieras conocer a más personas como tú, sobre todo si no tienes amigas lesbianas, o si deseas encontrar una pareja
Más adelante, tal vez quieras salir con alguien. Te será más fácil conocer mujers si vives en una ciudad con un buen ambiente homosexual, pero aunque estés en un sítio más remoto, eso es ahora más fácil que nunca. Los sitios web, las revistas lesbianas y las guías de las ciudades contienen información sobre todo tipo de grupos sociales, bares y colectivos.

Estas organizaciones pueden estar dirigidas a personas que acaban de salir del armario o también pueden tratarse de grupos de ocio, de debate, deportivos, sociales, políticos e incluso religiosos. Es una buena forma de conocer amigas con ideas y gustos similares o de crear una red de apoyo, lo que es muy útil si acabas de trasladarte a la zona o de terminar una relación.

En el enlace podrás ver los enlaces a las distintas asociaciones y colectivos de españa, poco a poco iremos incluyendo más

Las lesbianas rechazan a los hombres

Que tengamos intimidad física y emocional con otras mujeres no significa que rechacemos a los hombres.
Es sólo que no queremos tener relaciones sexuales con ellos. Aun así, muchas mujeres las han tenido e incluso se han casado o han tenido hijos antes de decidirse a declararse lesbianas y vivir como tales.

Todas somos distintas: algunas mujeres lesbianas se relacionada poco con los hombres, mientras que otras tienen amigos íntimos.

Hoy en día, muchas lesbianas se deciden por la compaternidad con amigos. Es probable que la idea de que no nos gustan los hombres surja de los propios hombres. El lesbianismo les provoca una gran inseguridad, a no ser que ellos participen, lo que casi nunca sucede.

¿A QUE LE TENEMOS MIEDO LAS LESBIANAS?

¿A que le tememos? ¿A sonreír? ¿A hablar? ¿A mirar? ¿A sentir? ¿A que te engañen? ¿A no hacer lo que quieres? ¿A enamorarte? ¿A la vida? ¿A que te amen? ¿A no amar tanto como crees? ¿A amar más de lo que te aman? ¿A no tener pareja?
Los miedos paralizan las acciones. Los miedos son una sensación de dolor y de nostalgia a algo que quizás aún no esta presente y aunque lo estuviera ¿qué te cuesta trabajo? ¿Aceptar las cosas? ¿Que tus sueños no se cumplan?, ¿Que tu vida no es la que quieres?
Si hay algo que te da miedo, enfréntalo. No dejes que los miedos te invadan. Analiza lo que quieres hacer. No te preocupes más de la cuenta. Acción. Haz lo que tengas qué hacer, enfrenta tus sentimientos. Habla, lucha por lo que quieres, lucha por tus sueños, por tus proyectos.
Ahora, ¿te quieres comer el mundo? Está bien, pero no te estreses. Ve tus posibilidades, aumenta tus recursos, haz planes, llévalos a cabo, habla con quien tengas qué hablar. Vive, vive cada día al máximo. Disfruta lo que tienes en este momento.
Vive el hoy. El hoy determina lo que el destino te depara, construye día a día tu camino. No te angusties pensando en el mañana. Forja día a día, verás que las cosas toman rumbo, nada es perfecto. A veces las cosas no salen como las esperas o como las planeas. Aprende, levántate, siempre hay un día nuevo.
Piensa en el mañana, pero trabajando desde el hoy, porque te angustias pensando en qué vas a hacer mañana, vive el hoy con pasos firmes, buscando lo que quieres, siempre la vida nos sorprende con muchas cosas. El tiempo avanza, así que debes avanzar junto con el tiempo. Construye día a día.
Muchas veces tenemos miedo de lo que podríamos no ser capaces de hacer, de lo que podrían pensar si lo intentamos. Dejamos que nuestros temores se apoderen de nuestras esperanzas, decimos que no cuando queremos decir sí. A veces nos callamos cuando queremos gritar y gritamos con cuando deberíamos callar. Recuerda que hay que vivir cada día al máximo. No hay tiempo para tener miedo. Muchas veces creemos en el destino, esperamos que las cosas pasen y nos olvidamos de lo más importante: ¡¡¡creer en nosotras mismas!!!
Nos conformamos en vez de arriesgarnos, sin pensar que cada día que pasa nunca volverá. O al contrario, el tiempo que pasa te preocupa porque crees que no has hecho lo suficiente y quieres hacer más. Adelante, aleja tantas angustias, ve logrando objetivos, concéntrate en lo que quieres hacer.¿Puedes con todo? ¿Quieres hacer más? Date tiempo, relájate, aprende a disfrutar lo que tienes y ve por más también Toma en cuenta que si te preocupas más de la cuenta no vives el hoy y todas tus acciones determinan el mañana.
"Nada está escrito. Nada está hecho, ni siquiera lo imposible. Todo depende de nuestra voluntad, de esa fuerza que nos sale de adentro, de decir "si puedo" a cada desafío, sólo hay que proponérselo. Si sueñas con lograr algo, con destacar, con realizar una profesión, con lograr un objetivo, con cambiar, date cuenta que dentro de ti hay 206 huesos y más de 700 músculos esperando, sólo falta tu decisión, tus ganas de luchar por tus sueños".
Enfréntate a tu destino, corre cada día un poco más lejos, salta cada día un poco más alto. Date cuenta que ahí están quienes siguen corriendo cuando le tiemblan las piernas, quienes siguen jugando cuando se les acaba el aire, quienes siguen luchando cuando todo parece perdido, sufren pero siguen adelante, porque saben que el dolor pasa.
Hay algo que no desaparece, la satisfacción de trabajar por lo que quieres, por lo que sueñas, la diferencia es el espíritu, la determinación. El miedo paraliza y no permite que la reacción adecuada pueda manifestarse. Aquéllo que llamamos "nuestros sueños" es justamente lo que hemos venido a hacer, que nada detenga la manifestación de tus sueños.

¿COMO SE SI SOY LESBIANA?

"Siempre me había sentido atraída por las chicas. Recuerdo haberme enamorado desde el tercer grado. Si bien no me consideraba lesbiana, en tercer grado ni sabía lo que era una lesbiana. No me di cuenta hasta el séptimo grado que, pues bien, yo era lesbiana".
"Bien, el saber que era lesbiana nunca fue la cuestión. Aceptarlo lo fue. Comencé a sentirme atraída por las chicas a los siete años, por lo que sabía que no era heterosexual. Tardé un tiempo en decirme a mí misma, 'Soy lesbiana y no hay nada malo en ello'". Durante la adolescencia, la mayoría de las jóvenes comienzan a percatarse de sus sentimientos sexuales y se interesan por salir con su pareja. Muchas jóvenes se sienten atraídas físicamente por los hombres. Pero muchas otras jóvenes se sienten atraídas físicamente por otras mujeres. Tú tal vez observes que te atraen otras mujeres. Tal vez sientas distinto que tus amigas, como que no encajas a veces. Cuando tus amigas se fijan en los muchachos, tú tal vez te fijes en las chicas. Salir con muchachos tal vez no te interese. Tal vez te preguntes, "¿Por qué no hay hombres como estas mujeres estupendas que se me presentan constantemente?" Es probable que también te sientas confundida o insegura sobre si eres o no lesbiana. Los adultos tal vez te digan que eres demasiado joven para que te llames a ti misma gay, o que estás pasado por una etapa, o que no sabes de lo que hablas. Esa es su forma de evitar el hecho de que algunas de nosotras somos jóvenes lesbianas. Tal vez te sientas confundida porque te atraen tanto los hombres como las mujeres. No hay nada malo en ello. Algunas mujeres tienen relaciones con hombres y mujeres durante toda la vida. Algunas tal vez decidan ser exclusivamente lesbianas o heterosexuales. Nuestra sexualidad se desarrolla con el tiempo. No te preocupes si no estás segura.

¿DONDE ESTAN LAS LESBIANAS?

¿Dónde están las lesbianas? Es la pregunta que se hace mucha gente del movimiento LGBT, incluidas las mismas chavas que quieren conocer otras chavas. ¿Dónde están? Los grupos lésbicos siguen trabajando desde sus espacios
Muchas mujeres han pasado por estos grupos, pero luego se enfocan a su relación de pareja, al trabajo y dejan de asistir al grupo en el que convivían: Es hasta después de muchos años cuando es posible volver a ver a aquellas mujeres con las que empezaste tus primeras pláticas en el ambiente lésbico.
Y cuando las vuelves a ver, algunas ya tuvieron muchas relaciones de pareja, otras ya terminaron la carrera, otras con la misma pareja y quizás te lleves la sorpresa de que alguna es mamá. La mayoría de las activistas que están trabajando por el movimiento lésbico, son las mismas desde hace tiempo, urgen nuevos liderazgos, empezar a hacer un nuevo activismo.
Algo más dinámico que atraiga a todas esas mujeres que no pasan por los grupos, que no asisten a eventos, hacer que las mujeres participen activamente en diferentes eventos, crear compañas en específico y hacer que el discurso político y la forma de hacer movimiento LGBT sea realmente atractivo y no desgastante.
Los medios de comunicación constantemente buscan la presencia lésbica para que haya visibilidad, pocas son las mujeres que van a programas de radio o de televisión y quienes asisten por supuesto que es valiosísimo su presencia.
Muchas mujeres se conocen en los bares y en los espacios lésbicos, la dinámica de relacionarse hoy en día ha rebasado a las generaciones de lesbianas, la forma de ligar, de vestir, de actitud, pero aun así se ve reflejada una violencia entre las mujeres. Hace falta poner más atención para trabajar en esta problemática. La violencia lésbica es una realidad que no podemos ocultar, hace falta trabajar en más campañas en específico y promover más información dentro de los espacios.
Las mujeres lesbianas estamos en todas partes, muchas ejerciendo su profesión, viviendo en pareja, promoviendo la cultura, promoviendo espacios lésbicos, enfrentándose a la reacción de los padres, aceptando su orientación sexual, conociendo gente a través del Internet, conociendo gente en los antros.
Unas están iniciando o terminando una relación de pareja, otras sin conocer aún a otras mujeres, unas más están leyendo esta sección o quizás sufriendo discriminación.
Muchas están pensando en ser madres, algunas están siendo felices, muchas tratando de ser felices, muchas mujeres lesbianas alrededor del mundo también sienten, viven, aman, y comparten la misma orientación sexual que tú.
¿Te imaginas qué tan importante es que cuando hay que estar en un espacio lésbico estés, y que puedas apoyar por ejemplo una iniciativa de ley y tengas el valor para defender tus derechos y sobre todo te sientas parte de una comunidad lésbica, que a pesar de las diferencias pueda haber respeto y apoyo y encontrar propuestas atractivas que aporten y construyan?
Debemos dejar de lado tanta apatía que existe, es importante involucrarse en eventos, participar, opinar, proponer, buscar información. Es importante estar fortalecidas, tener proyectos, seguir proponiendo nuevas alternativas y opciones de información y de expresión.
Hay que buscar como relacionarnos entre la comunidad LGBT, dejar a un lado las luchas de poder, acercarse, reconocer el trabajo y las iniciativas que propongan y aporten. Son muchos los temas que se quedan pendientes. Por ello es importante buscar la voz, la participación, nuevas propuestas de expresión lésbica y crear una cultura de información y de participación entre nosotras.

El sexo lesbiano no es verdadero sexo

El "verdadero" sexo tiene que incluir a un hombre y, como el sexo lesbiano no lo hace, no puede ser completo ni satisfactorio.
Lo que lleva al siguiente error: que todas usamos el consolador en un intento de recrear el acto heterosexual. Las lesbianas son amantes muy ingeniosas; el cuerpo y la relación sexual de las mujeres ofrecen muchas posibilidades eróticas.

Es cierto que unas mujeres usan consoladores o juguetes sexuales, pero otras no. Unas penetran a sus amantes y otras no. A algunas lesbianas les gusta el sexo anal y otras no lo soportan. A algunas les gusta el sexo duro y otras lo prefieren más tierno y suave. Todo ello forma parte de una identidad sexual muy diversa.

Carta de una hija lesbiana a su madre

Todas sabemos lo difícil que resulta hablar a nuestras madres sobre nuestra orientación sexual. Encontré esta carta de una hija lesbiana le escribía a su madre y tenía que compartirla con vosotras, espero que os guste.

¿QUE ES LA REALIDAD SINO LO PODEMOS VER Y SENTIR?

¿QUE ES LA REALIDAD SINO LO PODEMOS VER Y SENTIR?
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